Última fecha de actualización: miércoles, 07 de febrero de 2024

¿Quiénes Somos?


Sectores de FIRA
FIRA es una Institución dedicada a apoyar el desarrollo de los sectores rural, agropecuario, forestal y pesquero del país a través de intermediarios financieros y empresas especializadas, otorgamos crédito, garantías, capacitación, asistencia técnica y transferencia de tecnología para que productores y empresas rurales como tú, puedan iniciar o hacer crecer sus proyectos productivos

Los Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura "FIRA", son cuatro fideicomisos públicos que tienen el carácter de entidades de la Administración Pública Federal, en los que funge como fideicomitente la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y como fiduciario el Banco de México, cuyo fin es facilitar el acceso al crédito por medio de operaciones de crédito y descuento, así como el otorgamiento de garantías de crédito a proyectos relacionados con la agricultura, ganadería, avicultura, agroindustria, pesca y otras actividades conexas o afines que se realizan en el medio rural.

Actividades que apoyamos, Producción Primaria, Agroindustrial, Comercialización, Servicios relacionados a la integración de las cadenas de valor

Los fideicomisos que integran FIRA son:

  • Fondo de Garantía y Fomento para la Agricultura, Ganadería y Avicultura (FONDO)
  • Fondo Especial para Financiamientos Agropecuarios (FEFA)
  • Fondo Especial de Asistencia Técnica y Garantía para Créditos Agropecuarios (FEGA)
  • Fondo de Garantía y Fomento para las Actividades Pesqueras (FOPESCA)

Estos fideicomisos se sitúan dentro de los fondos y fideicomisos de fomento económico del Sistema Financiero Mexicano. Operan en segundo piso, por lo que colocan sus recursos a través de diversos Intermediarios Financieros: FIRA también otorga apoyos para actividades de capacitación empresarial, asistencia técnica, consultoría, transferencia de tecnología y fortalecimiento de competencias, con el fin de mejorar la competitividad y sostenibilidad de las empresas y productores del medio rural, así como de los Intermediarios Financieros.

¿Cómo Operamos?


Contamos con más de 100 oficinas de atención en todo el país, así como con una extensa red de agentes tecnológicos e intermediarios financieros bancarios y no bancarios para hacerte llegar nuestros recursos:

Estructura Organizacional

Estructura Organizacional

Un poco de Historia

Origenes de FIRA

En 1954, El Gobierno Federal y el Banco de México tenían ante sí un enorme reto: estimular una mayor participación de las instituciones de crédito privadas en el financiamiento de la agricultura, ganadería y avicultura del país. Así fue como nacieron los primeros fideicomisos de fomento del Banco de México, Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA).

El sector agropecuario en esa época representaba más de un cuarto del tamaño de la economía y empleaba a más del cincuenta por ciento de la población. Sin embargo, la participación del sector privado en el financiamiento agropecuario era esporádica.

Los Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura, se crearon con la misión de incrementar la productividad en el sector agropecuario, promoviendo en México el mercado de servicios financieros y técnicos del campo para de esa manera, impulsar su desarrollo. De hecho, en la Ley somos considerados como banca de fomento. Para lograr esta misión, FIRA contó entonces con los medios para otorgar un financiamiento a tasas preferenciales para el campo y la asistencia técnica requerida por los productores, a fin de que sus proyectos fueran viables; pero fue mucho más allá, al ofrecer al medio rural los servicios técnico financieros de un reconocido y honesto grupo de expertos: agrónomos, veterinarios y biólogos entre otros, así como profesionistas con perfiles más vinculados a la parte financiera, legal y administrativa, que han contribuido a incrementar un capital humano especializado en el sector agropecuario del país.

A lo largo de estos 60 años, el trabajo de la institución ha integrado el esfuerzo de todos los agentes que intervienen en cada etapa del proceso productivo en torno al sector agropecuario: los productores primarios y quienes les proveen los insumos que requieren; los que procesan e industrializan los productos agropecuarios y, desde luego, quienes participan en el sector servicios, distribuyendo, transportando y vendiendo los alimentos a los consumidores. Al lograr la integración de la cadena, se ha promovido tanto el desarrollo de la producción primaria, como el equipamiento tecnológico, el almacenamiento, la comercialización y la industrialización.

En estas seis décadas nuestra institución ha ido construyendo fortalezas. La más importante, quizá, es que fomentamos el desarrollo del mercado financiero, en virtud de que FIRA no da créditos directamente al acreditado final, sino a través de intermediarios financieros, esto es, en "segundo piso". Así, no interfiere ni desplaza a las instituciones privadas de crédito. Además, el conocimiento técnico y la experiencia que hemos acumulado nos permiten conocer cuál es el ciclo normal de un proyecto y su duración, conocimiento a partir del cual apoyamos a los intermediarios para que evalúen el proyecto, establezcan mitigantes de riesgo y provean las condiciones crediticias que el proyecto requiere. Mediante las garantías que damos a los intermediarios financieros, éstos comparten un porcentaje del riesgo del crédito.

Presente de FIRA

La reforma constitucional de 1993 que otorgó autonomía al Banco de México a partir de abril de 1994 estableció que éste, podría fondear a FIRA hasta 2013. El plazo ya se cumplió y FIRA ha dado el paso a la auto sustentabilidad manteniéndose como el banco de fomento más competitivo, adoptando como vocación mejorar sus servicios a la población del medio rural y sus intermediarios financieros, desarrollando nuevos productos más apegados a las diferentes demandas de su población objetivo y a las necesidades de los intermediarios financieros, tanto bancarios como no bancarios. Sólo con innovación focalizada y sobre bases sólidas, nos mantendremos como una institución útil para el sector.

Entre los cambios de estrategia que ha hecho FIRA para enfrentar el nuevo desafío, destaca el enfoque al cliente, adecuando los servicios al acreditado, haciéndolos más sistemáticos y efectivos, brindando la asistencia técnica para detonar el crédito e incrementar la productividad del campo. Adicionalmente, FIRA promueve que haya estabilidad en el sector agropecuario.

FIRA ha venido trabajando con una nueva clasificación de estratos de acreditados, definidos por el nivel de crédito al que acceden.

Así, al terminar de pagar el préstamo del Banco de México, fue necesario adecuar la operación de FIRA en dos sentidos: en primer término, para enfocar mejor nuestro esfuerzo a la conformación de sujetos de crédito en el sector rural y, por otro lado, para hacer una clasificación más detallada y exacta de las necesidades de cada productor.

Al reclasificar las unidades económicas rurales de acuerdo con el nivel y potencial de desarrollo de empresas y productores, y al mismo tiempo, adecuar el costo del financiamiento que otorgamos a través de nuestros intermediarios a tasas de interés diferenciadas, se reconoce el manejo de las prácticas administrativas, operativas y de gobierno corporativo de los intermediarios y la institución se vuelve a su vez, sustentable en el tiempo. De esta forma, FIRA ha venido desarrollando innovadores productos financieros de garantía que han permitido una mayor toma de riesgos y penetración del financiamiento por parte de los intermediarios financieros.

La asistencia técnica que brindamos es dirigida para multiplicar sus efectos, identificando qué redes de valor tienen más productividad y competitividad. Este mapeo permite a la institución detectar oportunidades de financiamiento y determinar cuáles deben ser las estrategias adecuadas para solucionar los problemas que se presenten, colaborando con las distintas dependencias y entidades del Estado Mexicano para generar las políticas públicas que se adapten a la realidad actual y de esa manera generar los cambios que requiere el desarrollo nacional.

FIRA hacia el futuro

La situación de México con respecto a 1954 es muy distinta. La economía de nuestro país está cada vez más vinculada a los mercados internacionales y en consecuencia, buena parte de los empresarios exitosos del país se han orientado hacia la exportación. Actualmente el reto es producir con altos estándares de calidad y precios adecuados. Nuestro desafío es apoyar el desarrollo del medio rural, inclusive cuando sus fuentes de ingreso no sean agropecuarias, y profundizar en el desarrollo de actividades primarias con mucho potencial por la vocación productiva del país en actividades hortícolas, frutícolas, pecuarias, de acuicultura, maricultura y forestal.

A más de 60 años de distancia de su creación, podemos afirmar con orgullo que durante este tiempo FIRA, al apoyar a productores y empresas del sector rural, ha fortalecido y ayudado a mantener la actividad imprescindible de los seres humanos: la generación de alimentos. Al hacerlo, hemos puesto nuestro grano de arena en el mejoramiento de la calidad de vida de miles de mexicanos.

Durante los próximos años, el reto de FIRA será adecuarse mejor a las necesidades de productores y empresas. El nuevo modelo de negocio de FIRA estará determinado por la capacidad transformadora de la institución para continuar siendo competitiva en el mercado financiero de productos y servicios en el sector agroalimentario; mantenerse como un referente sectorial para la toma de decisiones, y proseguir con la tarea de hacer del extensionismo de los años cincuenta, una filosofía de desarrollo humano, especializada, innovadora, adaptativa y de amplio alcance, en el marco de una economía global.

La grandeza de un país es la suma de un sinnúmero de logros individuales y colectivos. Las historias de éxito que presentamos a continuación son sólo una pequeña muestra de la gran transformación que ha tenido lugar en el sector rural de México. Son una muestra también, de cómo esos cambios están impulsando el desarrollo de nuestro gran país.